jueves, 24 de noviembre de 2011

Cómo un flan

Se acerca el día esperado y estoy como un flan, estoy muy impaciente, tanto que me ha dado urticaria neviosa, y esque mañana es un día importante para mí, es el día de una despedida, pero también de una gran bienvenida, asique eso hará que no esté triste por tener que desprenderme de Nena, mi hurona, mi chiquitina, tan buena ella, pero yo no le puedo prestar la atención que se merece, asique gracias a dios tengo buenos y grandes amigos que la quieren, se la queda "Súper" que seguro que la va a querer con locura.

A lo que iba, se acerca la hora y estoy tiritando, literalmente, no veo el momento de abrazar a toda la gente que echo de menos, a Wendol, Eva...madre mía, nosé si tantos nervios son normales, dudo que me haya sentido así alguna vez, esas ganas de abrazarlas a ellas se suman a las ganas de abrazar a "Dennis" y así me encuentro, me siento muy fuerte y a la vez demasiado vulnerable, no sé cual va a ser mi reacción ni la suya, lo que si sé es que el abrazo va a ser infinito, y ahí es donde quiero que el tiempo se detenga, demasiado para mí...

Espero estar a la altura de la situación, porque me siento muy pequeñita ahora mismo, a ver que tal se da todo.
Y si no..pues nos vemos en el infierno...







miércoles, 23 de noviembre de 2011

Estaba tardando...

No quisiera insistir demasiado acerca de la belleza del alano, que a fin de cuentas es demasiado evidente, sino especialmente sobre su carácter... Por ejemplo, la facilidad de su adaptación. Se puede pensar que un perro tan grande sea incómodo y fastidioso, pero no existe nada más falso, ya que el alano posee la exacta concepción de sus dimensiones y difícilmente mueve algo dentro de la casa, si no puede pasar, espera que su amigo el hombre venga en su ayuda. Muchas veces me doy cuenta de cuánto se lamenta de su suerte de gigante, apoya su cabeza sobre mi regazo y a veces una pata y lo veo que se muere de ganas de ser cogido en brazos.
Nunca pierde su dignidad de alano, pero sabe aceptar con humildad mis regañinas y sin recurrir a la fuerza logra que le haga lo que debo.
Decidido e impávido, fiero y conocedor de su potencia, ladra cuando un extraño se aproxima a su propiedad. Su voz es profunda, de tonos bajos y se puede decir que desanimadora para aquellos que tengan malas intenciones... Su sola presencia infunde respeto a los hombres y a los perros... Es difícil de conquistar por aquellos que conoce poco y se comporta siempre y en todas las ocasiones, como si el centro del mundo fuera su patrón, los demás no cuentan.
... Pienso en esta raza como en un fragmento de arrogancia de la madre naturaleza, que ha querido obsequiarnos con el aspecto físico de un atleta, potente y vigoroso, con el porte fiero y regio de un noble, la inteligencia y el equilibrio de un hombre inteligente y equilibrado y la alegría de vivir de un muchacho...

Estaba tardando en escribir sobre ellas, mis "enanas" Yigo y Akira, mis compañeras, mi alegría...no sé como describirlo, son una maravilla, el amor hecho forma, no existe nada más cariñoso y bueno, siempre solícitas ante cualquier cosa, pendientes de todos los miembros de la familia, nunca dejarían que nos pasase nada, las mejores niñeras y compañeras de fechorías de cualquiera de la familia,te miran con sus ojos color chocolate y te derrites, no les puedes decir que no a nada, son demasiado buenas... no sabría como describir todo lo que me dan sin pedirme nada a cambio.

Yigo es tan madraza... tan cuidadosa con todo y tan paciente... amable con todos los que lo merecen, nunca tiene malos gestos, siempre se comporta como debe, es toda una señorita.



Y Akira...es tan grandota que te choca verla comportarse como un cachorro, siempre está jugando y saltando, siempre está contenta, amigable con todo el mundo... con lo mal que lo ha pasado mi "pistacho" y nunca ha perdido la alegria.



Son lo más bonito que hay, mis confesoras, mi paño de lágrimas y de alegrías, no puedo quererlas más porque explotaría.





martes, 22 de noviembre de 2011

La espera de todo y de nada

Cuando esperas que pase algo importante, todo va mas lento, el día se hace largo, la noche infinita y no eres capaz de dormir bien hasta que pasa, y cuando pasa... todo es vacío, porque ahora tienes que buscar otra cosa a la que esperar para mantenerte alerta.
Las sorpresas no  me gustan, en eso debo parecerme al zorro del principito, que quería saber la hora en la que iban a ir a visitarle para poder preparar su corazón, yo igual pero con todo, me gusta tener mi corazón preparado para lo bueno y la trinchera para lo malo, esto último es muy difícil, si pudiesemos estar preparados para todo lo malo entonces lo evitaríamos a toda costa y no viviríamos del todo, porque para disfrutar lo bueno, tienes que vivir lo malo, es la útopía de la felicidad, no se puede ser feliz siempre porque entonces...¿cómo diferenciariamos la felicidad si no vivimos la tristeza? yo sinceramente prefiero  pensar que no hay tristeza si no grados de felicidad, de mucha a poca y así ser feliz siempre, al fin y al cabo todo lo malo trae algo bueno, o por lo menos una experiencia que te hace madurar o darte cuenta de cosas que quizás no verías nunca si no vivieses ese momento.
Yo espero muchas cosas aunque sean aún imposibles y otras que no lo son tanto (o eso quiero pensar) y a veces muy poco pero es importante.
Ahora espero el viernes por la mañana, en concreo las 11 de la mañana, luego las 12:20 y luego las 12.30 y luego espero fervientemente que el tiempo se detenga ahí, en las 12:30 del viernes 25 de Noviembre de 2011, que se pare del todo y ya no esperar nada más y por el momento tengo el corazón preparado para eso.
Estoy esperando tanto para que sea sólo eso, tanto en un momento o unos días y luego nada, porque es eso, es mucho para convertirse en nada o quizás sea nada ya y yo piense que es mucho, como todo, siempre me hago ilusiones, no lo puedo evitar, no aprendo de ese tipo de cosas, siempre preparo mi corazón para momentos que luego nunca pasan, entonces echo de menos la trinchera y odio mi ingenuidad, en vez de simplemente vivir y no esperar, que pase lo que tenga que pasar, para no llevarme decepciones, como siempre, porque siempre quiero cosas que no tengo y pido cosas que no debo o quizás sí pero no sea el momento adecuado, como siempre, ¡¡¡pero esque quiero preparar mi corazón!!! y es muy dificil hacerlo sin saber que esperar... asique bueno creo que lo mejor será hacer la espera de todo y de nada a la vez (a ver cómo se hace eso).
Y despues de esperar tanto, y haberse preparado para eso toca prepararse para lo de después, cuando por lo que esperaste desaparece, eso es lo duro, por lo menos ahí si que sabes que va a pasar y te puedes meter en la trinchera, aunque es mejor arriesgarse aunque luego se pase mal, que te domestiquen aunque luego toque despedirse, es triste pero por lo menos ganas algo, una amistad, una experiencia...algo, y yo supongo que esta vez también pasaré de la trinchera y me arriesgaré, porque la ocasión lo merece y porque el zorro, esta vez, también.







Las converse

Esas magnificas converse, incansables y todoterreno, siempre estan ahí, y siempre me gustan, sea con lo que sea me parece que quedan bien, con vaqueros, con falda, con vestido...lo que pasa que no me las pongo ni con vestido, ni con falda, al parecer no tengo edad y es una horterada... no sé, me hacen sentir bien y cómoda, puedo ir a todas partes con ellas, han andado casi lo mismo que yo y conmigo, tienen los mismos recuerdos, todos buenos, porque siempre que me las he puesto, los recuerdos han sido buenos, conciertos, bares, fiestas, películas, exposiciones... amor, canciones, bailes... siempre ahí, y no se lavan, no no no, que me gustan así, raidas y sucias, con todos sus recuerdos pegados a la tela, con el mordisco de Zoe en la puntera y el de Akira en el talón, rasgadas en el lateral quizás también por otro mordisco y con la suela casi rota, las mías están mal, pero las hay peores según el punto de vista, a mí cuanto más viejas y rotas más me gustan, mas recuerdos y más felicidad acumulada, más historia.
Pero no tengo edad... al parecer voy a ir mejor con unos zapatos, que no me gustan o me hacen daño, o se me salen porque tengo el pie fino, o no puedo bailar con ellos ni saltar en un concierto, que si, que para de  vez en cuando vale, que están bien a  veces, entonces "a veces" si tengo edad para las converse y otras no, no las llevo siempre puestas, sólo cuando me apetece, no espero gustar o no a alguien con mis pies metidos en ellas, me las pongo y punto, al fin y al cabo, si le gusto a alguien le dará lo mismo que lleve unas converse, unos "Manolos" o unos zancos ¿o no? y sino... ¿voy a tener que aparentar toda la vida y dejarlas en el armario metidas si salir más? ¿encerrar todo eso que he vivido y medio olvidarlo? espero que no... porque entonces se perdería un poquito de mí, ese rock que me cala la piel, ese roll que me hace bailar como si el mañana no existiese y esas converse que me llevan a todas partes o las llevo yo para que se les peguen más cosas en la tela y así poder guardar esos recuerdos y tener un poquito de cada sitio, de Salamanca, Valladolid, Bilbao, Madrid... muchos sitios que no quiero olvidar, el concierto de Queens of the Stone Age en el Azkena o el de Declan de Barra en el Esperpento, todos especiales. las noches de curro en el Potemkin aguantando estoicamente largas horas sin parar mientras sonaban los Fuzztones a todo volumen, todo eso está pegado a ellas, yo decidiré cuando tengo edad, al fin y al cabo soy yo la que se las pone.




lunes, 21 de noviembre de 2011

Alomejor estoy haciendo demasiadas entradas en un día, y alomejor luego no vuelvo a escribir más aquí y esto queda en el pasado, olvidado por alguno y recordado por los que lo necesitan, como las fotos viejas.
Cuando te importa alguien que no creías que fuese a ser algo, amigo, compañero..yo lo llamo "socio" quieres saber, averiguar y conocer cosas sobre esa persona, y miras sus fotos viejas para martirizarte, porque eso es lo que haces, martirizarte mirando esos recuerdos de tu socio, te mueres de celos y te comes por dentro porque no eres tú quien sale en esos recuerdos o porque salen otras personas que ojalá no formasen parte de ellos, da igual el tiempo que haya pasado, tu las miras, lo pasas mal y sigues mirando, llamadme egoísta, pero sinceramente a mi me gustaría ser "la única" solo yo, que ni en el pasado ni en el futuro haya otra, que sólo pueda tener mi recuerdo y lo otro no exista, claro que eso es dificil, hay que recorrer y aprender mucho para dar con la persona  indicada para cada uno, pero da igual, yo enseño y vivo lo que haga falta con mi socio.
Aunque el no tiene la culpa y tampoco sabe lo que siento al ver esas fotos viejas y leer esos recuerdos suyos, en los que yo no estoy, porque es su vida y la ha vivido, igual que yo la mía y tampoco ha formado parte de ella hasta ahora.
Sí soy celosa en cierta medida, ya que los bueno momentos que haya tenido mi socio me gustaría que hubiesen sido conmigo, será envidia entonces?
No lo sé, y tampoco quiero darlo más vueltas aunque sea difícil no pensar en ello y siga dandome palos a mi misma por dentro, porque son por dentro, que él no se va a enterar.
Y todo esto para explicar que si miras fotos viejas, atente a las consecuencias, que nos gusta sufrir en estos casos igual que cuando tienes ganas de llorar por alguien y escuchas a Johnny Cash o Jeff Buckley o cualquier canción que tenga ese toque meláncolico que te hace recordar todo lo triste.
Que me voy mucho por las ramas, pero me da lo mismo, se me da mejor hablar que escribir, para que engañarnos, al fin y al cabo suelto la misma berborrea que ahora, pero se hace menos pesada.
Conclusión:













Hay canciones que las escuchas y te estremecen, yo en concreto tengo tres, nunca me canso, nunca me parecen demasiadas las veces que las puedo escuchar y cada una me produce una sensación según mi estado de ánimo, pero una cosa tienen en común, las tres a parte de especiales tienen su mensaje, tienen esa cosa que te hace querer lo que dicen siempre, no falla, las oigo y lo quiero, las oigo y quiero cantarlas a pleno pulmón sobre un escenario, en el parque, en plena calle, la ducha y sobre todo, a alguien al oido...expresan tantisimo y significan mucho más.
Hablemos de la primera: Love me Tender de Elvis Presley, el Rey del rock, el maravilloso Elvis, el hombre perfecto para cualquier mujer y el hombre que todos quieren ser. Quién no quiere lo que dice esa canción aunque sea en lo más profundo de su ser, aunque solo sea un ratito en algún momento de la vida todos lo hemos querido o lo queremos, "Amame con ternura, amamé dulcemente, nunca dejes que me vaya...".





Y la segunda? Cadillac Solitario, no es menos especial, alomejor no dice las cosas tan claras o quizás sí y depende quien la escuche, es maravillosa, el ínclito Loquillo, menudo "gentleman" al mas puro estilo rock, ese si que tiene actitud, el el típico que ves y por la calle y vuelves la cabeza porque llama la atención, no por su belleza ni mucho menos (ese no es su punto yo creo) si no porque pisa fuerte, va andando y dice aquí estoy yo, ¿y cuando sale al escenario y canta Cadillac Solitario? el tono, la letra..todo acompaña, yo también he querido siempre ir a L.A, dejar esta ciudad y cruzar el mar en compañía de esa persona especial, cuando la compartes es genial, cuando te dejan también, y cuando estás solo porque sí,  escuchas esa canción y te trae recuerdos de cuando la compartías o te dejaron, y sonríes, no lo puedes evitar, no es que me haga acordarme de alguien en concreto, simplemente de las experiencias, buenas y malas, y la canto, la bailo y me hago una performance si hace falta, es tan tan especial que no puedo describirla de otra manera más que con un gesto y por aquí es dificil, seguro que alguien sabe a que me refiero, porque a esa persona le pasa lo mismo.



 Y la tercera... esta si se trae tela, esta si es especial, tiene tanta historia, tantos recuerdos y tantas sensaciones que sólo el pensar en describirla ya me pone los pelos de punta: "Stand by me". Y aunque fuese cantada por primera vez por Ben E. King, cada uno tiene su versión, unos prefieren la de Ottis Reding, otros la de John Lennon, otros la de Calamaro y otros la de Bon Jovi, yo me quedo con esta, que no serán grandes estrellas de la música pero lo parecen. Creo que sobran las palabras, lo dice todo, "yo nunca tendré miedo mientras tú estés conmigo, cariño".



Para qué pensar en ti...


Para que pensar en ti, si he agotado mi fuerza.
No podré dejarlo así, pues mi alma ahí comienza.
Al recordar el pasado indago y encuentro lágrimas,
Los días pasados dejaron mal recuerdo, no cuerdo.
Sigo ausente pensando en ti, pasado y presente por presente.
En bandeja de plata mis más fuertes emociones, 
y dejaste de lado lo ofrecido.
Y me contaste que fue un contraste, que el arrastre de tu lustre porte dejaste porque no te enamoraste.
Mire usted amado mío, mi divina inspiración hoy calma, sufrí por ti una vez más porque al  abrazarte siento frio, y en campos dorados como mis esperanzas, recojo la amarga resistencia que yo ofrecí para tu amor. 

Como no sabía como empezar y quería probar esto del blog pues dejo aquí una cosa que escribí hace tiempo...demasiado tiempo quizás, lo último que escribí en mi cuaderno de "conocerme a mi misma" ese cuarderno que me iba a hacer conocerme y recuperar la confianza, el que iba a hacer que olvidase lo malo analizando cada problema, haciendome unas preguntas para encontrar al solución a todo...
Supongo que funcionó, por lo menos consiguió que no fuese lamentandome por las esquinas y lloriqueando cual perrillo recién separado de su madre, porque era así, todo siempre estaba mal, el mundo estaba contra mi y no sabía porqué, era duro, pero a esa edad todo es duro, todos te odian y tu eres el poseedor de la verdad absoluta sobre todas las cosas, y eso que dicen de "juventud divino tesoro"..te parece una patraña escrita por alguien que no tuvo las cosas difíciles como tú, jaja!!bendita ignorancia y bendita juventud, recuerdo ahora y no puedo evitar dibujar una sonrisa en mi cara, que horrible me parecía todo, nadie me comprendía y solo estaba yo contra el mundo, eso sí, aparecía por la calle el chico que me gustaba y todos mis males desaparecían, la vida me sonreía y todo era perfecto, sólo con verle se me olvidaba el resto del mundo...aunque bueno, si lo pienso ahora me pasa lo mismo, eso contando con que tengo tiempo para mirar a la gente que pasa por mi lado, porque otra cosa está clara y es que los problemas que podamos tener ahora puede que no nos hagan lloriquear todo el día o lamentarnos de nuestra existencia, pero porque no tenemos tiempo, sólo tienes libre para tí mismo ese momento en el que te metes en la cama, te quieres poner a repasar lo que has hecho durante el día, lo que pasa, lo que hay, el porqué de una cosa u otra, y caes tan rendido que ni eso, no tienes tiempo ni para repasar tu vida, o tu día.